
La Ruralidad como Oportunidad: Planificación para el Desarrollo Rural Sostenible en Colombia
Colombia es un país profundamente rural. Cerca del 26% de la población vive en zonas rurales (DANE, 2022), y más del 60% del territorio nacional corresponde a áreas rurales. Sin embargo, históricamente estas zonas han sido excluidas de los procesos de planificación, inversión pública, conectividad y garantías de bienestar. El desarrollo rural sostenible se presenta hoy como un imperativo ético, ambiental y económico que puede convertirse en motor de transformación territorial.
¿Qué es el desarrollo rural sostenible?
El desarrollo rural sostenible se entiende como el proceso mediante el cual las comunidades rurales pueden mejorar su calidad de vida, preservar sus recursos naturales y fortalecer su economía local de manera equitativa, resiliente y respetuosa del entorno. Involucra dimensiones productivas, ambientales, culturales, sociales y políticas, integradas en una visión de largo plazo (FAO, 2017).
Diagnóstico de la ruralidad colombiana
Desigualdades persistentes
- Según el DANE (2023), la pobreza multidimensional en las zonas rurales de Colombia alcanzó el 36,6%, mientras que en las zonas urbanas fue del 12,1%.
- El 83% de los hogares rurales tienen acceso limitado a servicios públicos esenciales como agua potable, saneamiento o electricidad de calidad (Encuesta Nacional de Calidad de Vida, 2022).
Afectaciones por el conflicto armado y el modelo extractivo
- Más del 80% de los desplazamientos forzados ocurren en zonas rurales (Unidad de Víctimas, 2023).
- La expansión de monocultivos, la minería sin regulación y la deforestación han puesto en jaque los ecosistemas rurales.
Brechas en infraestructura y conectividad
- Menos del 40% de los municipios rurales tienen conectividad digital adecuada.
- Las vías terciarias presentan deterioro estructural en más del 60% de su extensión (Departamento Nacional de Planeación, 2021).
Nuestra Propuesta: Territorios rurales sostenibles desde la planificación territorial
Desde Planifica Colombia, proponemos un enfoque sistémico que integre el ordenamiento territorial, la sostenibilidad y la justicia social como ejes articuladores del desarrollo rural.
- Planificación territorial rural participativa
- Incorporar instrumentos como los Planes de Ordenamiento Territorial Agropecuario (POTAs).
- Fortalecer capacidades locales para que las comunidades participen en la toma de decisiones.
- Enfoque ecosistémico y agroecológico
- Promover prácticas agrícolas sostenibles, diversificadas y regenerativas.
- Declarar y proteger áreas estratégicas de reserva ecológica y cultural.
- Infraestructura sostenible y equitativa
- Inversión en equipamientos rurales (centros de salud, escuelas, mercados campesinos) con diseño bioclimático y adaptado al territorio.
- Vías rurales integradas con movilidad limpia y accesible.
- Educación, conocimiento ancestral y apropiación tecnológica
- Programas de formación para jóvenes rurales en innovación agroecológica, turismo rural sostenible y energías renovables.
- Reconocimiento del conocimiento ancestral y sistemas de gobernanza propios de comunidades étnicas y campesinas.
- Gobernanza territorial y alianzas público-privadas
- Articulación de las entidades públicas, la empresa privada responsable, la academia y las comunidades.
- Promoción de cadenas de valor cortas, comercio justo y procesos de certificación participativa.
Casos de éxito
- Red de Reservas Naturales de la Sociedad Civil (RRNSC): más de 1000 predios rurales se han articulado para conservar la biodiversidad desde una lógica de propiedad privada con responsabilidad comunitaria.
- Asociación de Mujeres Campesinas del Macizo Colombiano (ASOMUCAF): experiencias de turismo rural comunitario, agroecología y soberanía alimentaria.
- Plan de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET) en Montes de María: avance en la formulación de proyectos de infraestructura productiva y educación con enfoque territorial.
Retos estructurales
- Persistente resistencia al cambio y ausencia de pensamiento prospectivo por parte de algunos tomadores de decisiones.
- Bajo cumplimiento del principio de subsidiariedad, que impide a los municipios rurales gestionar adecuadamente su desarrollo.
- Débil implementación del Acuerdo de Paz en aspectos clave como la Reforma Rural Integral.
De la deuda a la oportunidad
Transformar la ruralidad colombiana requiere ir más allá de programas asistencialistas. Implica reconocer la potencia de sus territorios como base de un nuevo modelo de desarrollo. Desde Planifica Colombia, ofrecemos soluciones concretas y articuladas a través de:
- Planificación territorial sostenible.
- Consultoría y ejecución de infraestructura con enfoque bioclimático.
- Educación para la transformación territorial (AULA PLANIFICA).
- Comunicación para la sostenibilidad y empoderamiento comunitario.
La ruralidad no es atraso. Es el futuro. Planifiquémoslo con responsabilidad y justicia.
Referencias
- FAO (2017). “El futuro de la alimentación y la agricultura – Tendencias y desafíos”.
- DANE (2022-2023). Encuesta Nacional de Calidad de Vida.
- Departamento Nacional de Planeación (2021). Informe Nacional de Infraestructura Rural.
- Unidad de Víctimas (2023). Registro Único de Víctimas.
- CEPAL (2020). “Desarrollo territorial rural: una estrategia para la reducción de desigualdades”.
- Oxfam (2021). “Radiografía de la desigualdad rural en Colombia”.